la semana después de tu regreso

sábado, 13 de marzo de 2010

hablando de ausencias...Dos semanas se sintieron como más de dos semanas cuando estuvo ausente. Ausente como siempre pero un poco más porque hablar por un medio a distancia se siente más cercano si se sabe que lo que nos separaba al principio eran solo dos avenidas y que ahora es todo un océano. Me irritó su ausencia a distancia y me irritó sentir que por algunos días no estuvo pensando en mí. Tal vez me falta mundo pero alguien a quien no conozco mucho y al que me gusta contarle mis secretos me dijo que lo desconocido distrae, entretiene y que tú debías estar conociendo muchas cosas nuevas que por un momento me desaparecieron de tu cabeza llena de humo. Lo entendí, todo tuvo sentido. Algo de sexo ocasional en Europa se le perdona a cualquiera, sobre todo porque no siempre se tiene sexo ocasional en Europa, porque yo también tendría sexo ocasional en Europa, porque tendrías sexo ocasional en Europa o no acá cuando me tienes a mí y porque no nos debemos nada el uno al otro. Los celos fueron superados por la razón de mi repentina objetividad antes los recientes sucesos y conversaciones con personas que no conozco mucho y a las que les cuento mis secretos. Tú eres mi secreto. Dos semanas que se sintieron como más de dos semanas después, ya estabas otra vez a dos avenidas de mí y, sin embargo, por alguna extraña razón seguía sintiéndote a un océano de distancia. Una semana después de tu llegada, supe de ti. No te pregunté nada, sabía que me contarías todo: si hay algo que te gusta es hablar de ti. Además soy algo así como la única persona que no te encuentra insoportable con tus delirios de grandeza.
Yo: Hola. ¿qué tal París?
Tú: Bien
Yo: ¿Solo bien?
Tú: Sí, solo bien
...
mierda.

5 comentarios:

Juan dijo...

En serio se ven tan feas, las palabras grandes?

Hola

Nefelibata dijo...

jaja algo así...pero es discutible

hola.

Juan dijo...

mmm nada nuevo?

Nefelibata dijo...

no. pero presiento que pronto tendré algo.

Juan dijo...

Ne FE li bata