sábado, 12 de diciembre de 2009

s/t 1.3

martes, 8 de diciembre de 2009

luego de escribir tanto sobre no tantas personas, sobre amigos, mejores amigos, obsesiones, cuasi amores, y amores no correspondidos, me pregunto si seré algo menos insignificante de lo que yo misma me considero como para merecer que alguien en este patético mundito de blogs en el que nadie da la cara me mencione en alguna historia. Una historia divertida, frívola, insignificante, en la que sea un personaje secundario o al menos el extra con la frase divertida y forzada, no pido mucho. Resulta que creo que todas las personas que escriben de alguna u otra forma tiene la secreta fantasía de que alguien escriba sobre ellas, o al menos es lo que me gustaría pensar para no sentirme tan patética.
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Soy demasiado predecible, lo he dicho antes y lo vuelvo a decir. Me cansaré de mantener relaciones anónimas e idealizadas, me cansaré de no dar la cara, de no ver caras, las veré, me arrepentiré, no volveré a escribir por un buen tiempo, leeré otro libro, me obsesionaré con una frase y crearé un nuevo blog. No soy musa de nadie.